Acabo de ver la pelicula "The Disappearance of Garcia Lorca" (La Desaparición de Garcia Lorca) y no puedo evitar la tristeza. Tantas muertes, tantas luchas, tantos inocentes y tantos cobardes. Tantas muertes en nombre de ideales y al final, qué? Porqué, después de tantos siglos de muertes y de guerras, aún no tenemos derecho a la paz?
Aqui el poema declamado por Andrés Garcia en la pelicula:
Llanto por Ignacio Sánchez Mejías
LA COGIDA Y LA MUERTE
A las cinco de la tarde.
Eran las cinco en punto de la tarde.
Un niño trajo la blanca sábana
a las cinco de la tarde.
Una espuerta de cal ya prevenida
a las cinco de la tarde.
Lo demás era muerte y sólo muerte
a las cinco de la tarde.
El viento se llevó los algodones
a las cinco de la tarde.
Y el óxido sembró cristal y níquel
a las cinco de la tarde.
Ya luchan la paloma y el leopardo
a las cinco de la tarde.
Y un muslo con un asta desolada
a las cinco de la tarde.
Comenzaron los sones del bordón
a las cinco de la tarde.
Las campanas de arsénico y el humo
a las cinco de la tarde.
En las esquinas grupos de silencio
a las cinco de la tarde.
¡Y el toro, solo corazón arriba!
a las cinco de la tarde.
Cuando el sudor de nieve fue llegando
a las cinco de la tarde,
cuando la plaza se cubrió de yodo
a las cinco de la tarde,
la muerte puso huevos en la herida
a las cinco de la tarde.
A las cinco de la tarde.
A las cinco en punto de la tarde.
Un ataúd con ruedas es la cama
a las cinco de la tarde.
Huesos y flautas suenan en su oído
a las cinco de la tarde.
El toro ya mugía por su frente
a las cinco de la tarde.
El cuarto se irisaba de agonía
a las cinco de la tarde.
A lo lejos ya viene la gangrena
a las cinco de la tarde.
Trompa de lirio por las verdes ingles
a las cinco de la tarde.
Las heridas quemaban como soles
a las cinco de la tarde,
y el gentío rompía las ventanas
a las cinco de la tarde.
A las cinco de la tarde.
¡Ay qué terribles cinco de la tarde!
¡Eran las cinco en todos los relojes!
¡Eran las cinco en sombra de la tarde!
(Federico Garcia Lorca)
La Guerra Civil Española y la inevitable posguerra se llevaron consigo centenares de miles de vidas. Aún hoy quedan testimonios de las batallas y masacres, de los hombres que lucharon en los diferentes frentes, de las mujeres en la retaguardia, de las hábiles estraperlistas, de los exiliados y los que vivieron las penurias en los campos de concentración de la Francia ocupada.
ResponderEliminarTodas las familias en este pais en el que me ha tocado vivir tienen su historia y memoria bélica. Los jóvenes que tuvimos la oportunidad de conocer a nuestros abuelos o bisabuelos nos hacemos cargo de su memoria.
Represión, libertades negadas, censuras, clandestinidad y muerte de vidas, de artes.
¡NO A LA GUERRA! ¡NO A LAS GUERRAS!
Besos Joa!