viernes, 21 de octubre de 2005

Interrogante...

“Uno sólo conserva lo que no amarra”.
Jorge Drexler (de Guitarra y Vos)


¿Qué hay de cierto en esta oración? ¿Querrá decir que aquello que no podemos tener o que se nos escapa de las manos es lo que más cerca llevamos del corazón? ¿Podremos amar a quien fue y ya no es más que a quien nos toma de las manos cuando le negamos una sonrisa? ¿O será que aveces amamos tanto a alguien que, aún sin tenerlos, nos sentimos dueño de una mirada, de su voz que nos habla entre sueños o del beso que nunca nos regaló? ¿Porqué nos empeñamos en tener lo inalcanzable; aquello que no apreciamos en su justo momento; aquello que nos dio la vida para luego quitárnosla; aquello que creimos real y nunca existió...?

12 comentarios:

  1. Te he enviado algo por correo-e

    Saludos.

    ResponderEliminar
  2. Joanne:

    No sé porqué los seres humanos no podemos amar a una persona sin sentir que "la poseemos". Incluso, durante el acto sexual, hay una especie de posesión del cuerpo y del alma de ese individuo con quien estamos compartiendo uno de los actos más instintivos, íntimos y deliciosos de la vida.

    Por más filosofía china que uno lea, siempre querrá sentir que la otra persona nos pertecene, pero no como un objeto (o por lo menos no debería ser así), sino como alguien cuyos pensamientos y esfuerzos están entregados en su totalidad a la cristalización y permanencia del vínculo que tiene con una.

    Pero por supuesto que todo esto dependerá del espíritu de las personas, pues hay criaturas para las que cadenas o contratos no tienen ninguna importancia, pero para otras eso tiene su significación y solemnidad.

    Yo pienso que lo ideal no es "amarrar" a la persona amada, sino crear una especie de complicidad y lazo que sostenga ese amor.

    Todos sabemos que hay muchísimas formas de amor (o formas de ver el amor) pero hay dos que me resultan interesantes: la primera es aquella en la que las personas se dedican a la ejecución del sentimiento sin ningún tipo de ataduras, y la segunda es aquella en la que el amor trae consigo un compromiso y una responsibilidad. Pero no compromiso como "obligación", sino como deber, porque cuando yo amo comprometo mi corazón con el de la otra persona, debo ser responsable de mis acciones y de la honestidad que debe haber en esa relación.

    Sobre eso que comentas de "empeñarnos en tener lo incalcanzable", quizás se deba a que nosotros siempre queremos tener aquello que deseamos, amamos o idealizamos. Cómo decirle a un corazón enamorado que debe desenamorarse, Cómo decirle a un espíritu soñador e idealista que deje de fantasear con el obeto de su idealización. Me gustaría pensar que la prudencia puede advertirnos y sacudirnos, pero en mi caso ha sido el tiempo y algunas caídas quienes me han devuelto la cordura.

    Un abrazo, amiga.

    Ro

    ResponderEliminar
  3. hola Joanne, al leer este verso creo que el asunto está en algo externo, conservamos a alguien no porque nosotros sólo hacemos "algo", pienso que la pertenencia se da cuando el otro decide darse, entregarse, hacerse propiedad del otro.

    "Yo soy tuyo porque quiero", y no tanto en "tú eres mía porque así lo deseo"

    Creo en la complicidad, en la decisión, en la entrega, en la construcción mutua, sino es así la cosa en algún momento muere.

    saludos de chile,

    Osvaldo

    ResponderEliminar
  4. Joanne! Porque borraste ese post tan bello de escasos versos? :_( Vuelvelo a colgar! Por favor! :D
    Un abrazo

    ResponderEliminar
  5. Hola Magda,
    Recibi tu correo. Muchisimas gracias. Ahora te escribo.

    Abrazos,
    Joanne

    ResponderEliminar
  6. Hola Ro y Osvaldo,

    Rosa, muy interesante tu comentario. Estoy de acuerdo contigo en que lo ideal no es "amarrar" a quien uno ama sino, como igual sugiere Osvaldo, que debe ser una complicidad. De otra forma una relación no sobreviviria.

    A mi me pasa que me adueño, no de la persona, pero si de la idea de esa persona, de su recuerdo. He amado tanto a alguien hasta sentirlo mio (no un un mal sentido) pero claro, porque esa persona se ha do a mi de igual manera. Es decir, tal como dices tú Osvaldo, ha habido una entrega mutua.

    Pero también creo que uno aveces se aferra a aquello que ha perdido o que nunca tuvo. Sé que esto no es saludable pero como dices Rosa, como le dice uno al corazón que deje de amar, especialmente si se trata de alguien como yo que tiende a romantizar las cosas demasiado. A mi también me ha tocado aprender a base de golpes y caidas. He logrado deshacerme de recuerdos hirientes pero aquellos que una me hicieron feliz y en los cuales encontré un amor verdadero siempre seguirán siendo una parte de mi. Son estos recuerdos los que por mucho tiempo senti mios; esos momentos en que la entrega fue tal que uno se cree parte del otro.

    Ro y Osvaldo, al igual que ambos, también creo en el amor responsable y honesto. Solo asi pueden dos seres entregarse y pertenecer el uno al otro.

    Gracias querida Ro por visitarme siempre. Gracias Osvaldo por tu lindo comentario.

    Abrazos a ambos,
    Joanne

    ResponderEliminar
  7. Hola Tipo Corriente!!!!

    Que lindo verte por aqui. Quité esos versos porque me parecieron tan pequeños, como tan poca cosa...

    Pero si me lo pides, claro que los vuelvo a poner. Ahora mismo.

    Besos,
    Joanne

    ResponderEliminar
  8. Las pequeñas cosas, como los pequeños versos, son las que hacen mi mundo. Gracias ;)

    ResponderEliminar
  9. Qué bonito eso que ha escrito Tipo Corriente.
    Ro

    ResponderEliminar
  10. De acuerdo contigo Rosa; qué lindo Tipo Corriente.

    ResponderEliminar
  11. Joanne una amiga blogera posteo una historia siux en su blog quizas te guste, aca la direccion de su blog

    http://marlencita.blogspot.com/

    que estés muy bien,

    Osvaldo

    ResponderEliminar
  12. Osvaldo,
    Lei la historia de tu amiga. Me encantó. Gracias ;)

    Joanne

    ResponderEliminar